LAS CROQUETAS CASERAS DE TODA LA VIDA

CROQUETAS CASERAS

INGREDIENTES;

1 Cebolla

1 pechuga de pollo

75 gr. de mantequilla

250 ml de leche

1 cucharada sopera de harina

Aceite de oliva

Pan rallado

1 huevo

100 gr. de harina

PREPARACIÓN;

En una sartén con un poco de aceite ponemos la cebolla, pelada y cortada, echamos una pizca de sal y dejamos freír uno minutos, después añadimos la pechuga de pollo cortada a trocitos y dejamos las dos cosas unos minutos para que terminen de hacerse.

En un recipiente trituramos la cebolla con la pechuga de pollo, añadimos un chorrito de leche para poder triturar mejor, debe quedarnos bastante espeso.

En un sartén ponemos la mantequilla a derretir y cuando este liquida ponemos la cucharada de harina, removemos a fuego lento dejando que la harina se tueste un poco añadimos poco a poco la leche (es mejor que la leche este caliente) y removemos, como si fuese una bechamel. Después añadimos la pechuga y la cebolla trituradas y seguimos removiendo. La textura es bastante espera, al remover la masa se tiene que ir desprendiendo de la sartén y debe ser homogénea. Comprobamos que este en el punto correcto de sal y al gusto de cada uno, yo le añado siempre un poco de queso rallado en este momento.

Retiramos la masa y la dejamos enfriar en la nevera tapada con papel de film, es mejor que la dejemos hasta el día siguiente.

Recuperamos la masa de la nevera y le damos forma a nuestras croquetas, yo lo hacho haciendo como churro largo y dos centímetros de grosor y después con un cuchillo vamos cortando cada tres centímetros o según el tamaño deseado. Pasamos las croquetas por harina, huevo y pan rallado en este orden y ya están listas para freír. En este momento también las podemos poner en congelador para freírlas hasta 6 meses después si queremos.

Las freímos en abundante aceite y a fuego bastante fuerte, solo tienen que dorarse.

Podemos cambiar la pechuga de pollo por rape, espinacas, bacalao, jamón u otros productos que nos gusten.